La adaptación basada en ecosistemas (AbE), un tipo de solución basada en la naturaleza (SbN), puede generar beneficios sociales y económicos y proporcionar múltiples beneficios, como una mejor salud, protección de la biodiversidad, seguridad alimentaria y oportunidades de medios de vida alternativos, todo lo cual puede generar resiliencia. al cambio climático.
Los ecosistemas saludables y resilientes son reconocidos en varios organismos y agendas internacionales, incluido el Acuerdo de París, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres, el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) y la Convención de las Naciones Unidas para Combatir la Desertificación. Específicamente, AbE está ganando importancia ya que reconoce que los servicios ecosistémicos ayudan a reducir la vulnerabilidad de las comunidades al cambio climático.
Los procesos de Plan Nacional de Adaptación (PNAD) presentan una oportunidad estratégica para elevar el perfil de los enfoques de NbS, proporcionando un marco, y, potencialmente, recursos financieros, para la implementación a escala.
